martes, 1 de mayo de 2012

Crisis y gasto público

En la entrada La dieta de Rajoy publicada el 20 de marzo en el blog ¡No doy crédito!, su autor, Juan T. Delgado, se pregunta lo siguiente refiriéndose a la economía española:
“¿Por qué el Gobierno no enfrenta al mayor problema de la economía, que es reformar en profundidad el sobredimensionado Estado?”
Más adelante dice:
“Las CCAA tienen presupuestado este año un gasto de 165.000 millones. Uno de cada tres euros de esta partida se destinará a pagar las nóminas del personal. ¿Es sostenible ese modelo? No.” (La negrita en el original)
Esta cita ejemplifica una visión bastante habitual sobre esta crisis y sus causas: el problema reside en que tenemos una administración pública sobredimensionada. En el caso concreto de España, además, se suele arremeter contra la estructura descentralizada del estado, a la que se atribuyen todos los males.
Es innegable que la administración pública española tiene un problema muy serio de financiación: los ingresos han disminuido por la crisis y los mercados sólo están dispuestos a prestarnos dinero a intereses de usura. Pero esta dificultad para conseguir dinero ¿se debe a que el Estado está sobredimensionado?¿es la dimensión de la administración pública el mayor problema de nuestra economía?
Una medida relevante del tamaño de la administración pública es cuánto gasta o lo que es lo mismo: cuánto nos cuesta. Si el estado está sobredimensionado generará un gasto público sobredimensionado. Una forma adecuada de expresar la magnitud del gasto público es en porcentaje del PIB: así lo ponemos en relación con el tamaño de la economía que lo soporta y eso nos permite comparar entre países. Vamos a ello. El gráfico 1 muestra el gasto público total como porcentaje del PIB para los 27 países de la Unión Europea y el valor promedio de toda la Unión. Los datos corresponden a 2011. Por conveniencia, se han ordenado de mayor a menor.

Gráfico 1. Gasto público como porcentaje del PIB en 2011 en la Unión Europea (general y por países)
Vemos que España, en gasto público relativo a PIB, está más de 5 puntos por debajo de la media de la Unión. Sólo 10 de 26 países tienen estados “de menor dimensión” que el nuestro. Veamos cuáles son. Por una parte está el pequeño, peculiar y extremadamente rico Luxemburgo, que difícilmente podemos adoptar como modelo. También tenemos a Malta, que aunque sólo sea por tamaño e insularidad tampoco podemos adoptar como modelo. Y por último tenemos un conjunto de países de Europa del Este con economías menos desarrolladas que la nuestra y que, de momento, no creo que queramos adoptar como modelos.
En cambio, los países más desarrollados de la Unión, los que se suelen citar entre los modelos a seguir, tienen todos ellos estados “de mayor dimensión”. Si la administración pública española está sobredimensionada, ¿cómo calificamos las de Alemania, Reino Unido o Francia?. “Los manirrotos españoles no pueden convertirse en un par de años en los austeros alemanes” nos dice Juan T. Delgado en otra entrada de ¡No doy crédito! publicada el 25 de Enero (Los españoles no podemos ser alemanes). Pues bien, no sé si la administración alemana gasta mejor o peor que la española, pero lo que sí es seguro es que gasta más.
Pero, un momento ¿no será que con los ajustes iniciados al final de la legislatura anterior nuestra administración ya se había apretado el cinturón en 2011? Bueno, vamos a verlo. El gráfico 2 es el equivalente al gráfico 1 pero con datos del año 2007, el último antes de la debacle de 2008 y con un horizonte completamente libre de recortes.
 
Gráfico 2. Gasto público como porcentaje del PIB en 2007 en la Unión Europea (general y por países)
Lo que teníamos en 2007 es que el gasto público en España estaba 6 puntos por debajo del de la media europea y que sólo 7 de 26 países tenían menos gasto público que España. La respuesta a la pregunta anterior es, por tanto, no.
Bueno, vale. ¿No será entonces que las administraciones españolas se gastan lo que no tienen, generando déficit, mientras que las de los países “modelo”, en cambio, gastan más porque pueden gastar más sin generar déficit público?. Podría ser..., vamos a tratar de comprobarlo. El gráfico 3 muestra la evolución del déficit público total como % del PIB para el conjunto de la Unión Europea y para una selección de países.

Gráfico 3. Evolución del déficit público en relación al PIB para la Unión Europea y una selección de países, periodo 2000-2011
En relación con el conjunto de la UE, España se ha mantenido por debajo de la media desde 2000. En los años buenos 2000-07, el déficit público español con relación al PIB se redujo del 59% al 36%. Del 2008 en adelante, en cambio, nuestro déficit público ha seguido la tendencia general del conjunto de Europa: aumentar. Pero manteniendo una ventaja de casi 15 puntos, que no está nada mal. En relación con los austeros alemanes la sobredimensionada administración española ha mantenido en todos estos años un déficit considerablemente menor. La respuesta a la pregunta anterior es, de nuevo, no.
En conclusión: en relación con los países de nuestro entorno, nuestra administración no está sobredimensionada. Si el tamaño de nuestra administración o la magnitud de nuestro gasto público es un problema mayor de nuestra economía, este no es específico de España sino endémico de Europa. En este caso, Alemania no sería un modelo a seguir.
En el contexto actual de reducción de ingresos y dificultades para obtener financiación, reducir el gasto público es seguramente una necesidad, pero no creo que sea una solución.
Fuentes:
Las entradas de Juan T. Delgado La Dieta de Rajoy y Los españoles no podemos ser alemanes en el blog ¡No doy crédito! pueden leerse aquí:
Los datos de los gráficos proceden de la web de Eurostat:

4 comentarios:

  1. Me ha interesado mucho esta entrada y me ha hecho pensar sobre las cuestiones que plantea. Me inclino por la tesis del articulista al que respondes, aunque no en la especial aversión por las comunidades autónomas, que en mi opinión merecen la misma aversión que el estado, pues no son más que una expresión de estado.

    Veo que tu trabajo, que bien te lo has currado, tiene dos partes que no quedan muy delimitadas.
    Por un lado intentas demostrar que nuestro estado español no es excesivo, con un gráfico que muestra que otros estados son más excesivos. Me dirás con razón que no se puede decir “más excesivo”; se es excesivo o no se es excesivo, y la gráfica sirve para delimitar, gracias a la media, lo excesivo (a la izquierda) de lo mesurado (a la derecha), siendo la media un concepto neutro. Esto es un flaqueza de la mente humana, que se deja obnubilar por la sencillez plástica de un gráfico y lo entiende asimilándolo a su código de conceptos. No debemos atribuir a un gráfico estadístico el poder de cambiar el significado de las palabras. Que el estado búlgaro recaude y gaste un 35 % es excesivo; lo de Francia (56 %) es un atropello, y un paso más allá está la esclavitud.

    La parte más interesante es la segunda: ¿podemos deducir que los paises de la izquierda, que parecen más modélicos (no deja de ser inquietante para esta tesis que la Superalemania esté a la derecha), son así de modélicos por ese mayor porcentaje de riqueza que sus tiranos le quitan a la gente? Los llamo tiranos porque detraen los impuestos por imposición, con amenaza de fuertes daños. ¿Podemos deducir que la cama es muy peligrosa porque es donde más gente muere? ¿Podemos deducir que la grasa totalmente hidrogenada es buena por lo bien que sabe?
    Volviendo a tu tema, he pensado estas cosas:
    1- ¿Son comparables los datos de unos países con los de otros? ¿Se entiende por PIB y por gasto público lo mismo en Bulgaria que en Finlandia? Es posible que existan unas directrices estadísticas para la Unión Europea, pero ¿se cumplen?
    2- ¿Se diferencia el gasto público de la inversión pública? A mí, por ejemplo, la sola palabra gasto ya me suena mal, ahorrativo como soy.
    3- ¿Los datos son de fiar?. Lo digo porque yo trabajo en una administración pública y emito cada año un buen puñado de documentos inexactos y formales con la seguridad de que el que los recibe no está interesado en leerlos pero sí en procesarlos. Y, créeme, no soy el único.
    4- A esos países que están a nuestra derecha, los ex-comunistas que ahora gastan un porcentaje del PIB inferior al nuestro, ¿no les gastaban sus gobiernos el 100 % del PIB hace 23 años, antes de la caída del Muro? Los berlineses destrozándolo a golpes no fueron una estadística, fueron historia.

    (continúo en otra entrada, se ve que me he pasado de los 4.096 caracteres)

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  2. 5- Tan importante como la producción puede ser la productividad. Si la productividad de los finlandeses es mayor que la de los españoles, lo que estará ocurriendo es que, a pesar del descomunal tajo que les da su gobierno, el 45 % de su renta que les queda es el fruto de menos horas de trabajo que las que ha empleado un español en adquirir ese mismo porcentaje del 100% de su producto personal bruto. Esto hace a los finlandeses resignados más a gusto con lo que sin duda es un mal absoluto: que te quiten lo tuyo.
    6- Puede estar ocurriendo también que los gobernantes de los países de la izquierda tengan hábitos de gasto más sabios y eficientes, por haber en esos lugares unos políticos más instruidos en el arte de la gestión que en los de la derecha. No veo manera de demostrar ni refutar esta afirmación.
    7- El caso de Dinamarca (el más abusón) no debe tenerse en cuenta más que para llamarlo el más abusón. Debajo de su territorio la geología ha colocado durante milenios y milenios grandes reservas de hidrocarburos, por lo que el estado danés no esquilma el fruto del trabajo de los daneses tanto como el resto de los países de la izquierda, ni quizás tanto como ninguno de los países de la tabla (sinceramente, desconozco qué peso tiene su producción de gas y petróleo en su PIB).
    8- ¿Para calcular el PIB español se han contado las viviendas construidas y no vendidas? ¿A cuánto han valorado el metro cuadrado de un piso cuyo dueño quiere venderlo y nadie se lo compra?
    9- El hecho de que la potente Alemania esté junto a España, ¿no demuestra que este factor no es el más relevante y que todos los países están más o menos afectados del mismo mal: el pago de impuestos excesivos? Fíjate en que, dentro de una escala de 100, todos los países están en una horquilla de 20. A mí todos me parecen lo mismo.
    10- Por último, ¿los países de la izquierda son más prósperos por su mayor gasto público, independientemente de su mayor gasto público o a pesar de su mayor gasto público? Julio Iglesias, Juan Manuel Serrat o Alejandro Sanz han triunfado con voces mediocres; Francisco o Rosa no tanto: ¿por su buena voz o a pesar de su buena voz? Dicho de otra manera: ¿los países de la izquierda son prósperos por su gasto público o tienen mucho gasto público porque son prósperos? Te animo a que escribas otra entrada sobre esta cuestión para deleite de los que te leemos.

    Posdata: el término “usura” no puede considerarse científico, sino sólo ideológico. Gracias a que hay alguien dispuesto a prestarnos a un 6% (más o menos) hay alguien dispuesto a prestarnos. El 6% no es ni deja de ser usura, es sencillamente el punto de equilibrio entre la necesidad del que pide y el miedo del que presta de no recuperar lo prestado (el estado es la institución más segura para pagar y para no pagar). Pero nosotros podemos alterar una de las dos fuerzas para cambiar el punto de equilibrio a nuestro favor: podemos viajar menos, comer menos, tomar menos cañas, tener menos ropa, menos electrodomésticos, etc, para tener que pedir menos.

    Palamedes

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    1. Muchas gracias, Palamedes, por tu extenso comentario y gracias por leer mi blog e interesarte por él.
      Planteas claramente tu postura sobre cuál debe ser la dimensión del estado. Mi articulo no pretende entrar en ese debate. Un debate que, por otra parte, quedaría reducido a especulaciones estériles si partimos de la base de que no existen datos fiables ni comparables. Sobre los datos poco más puedo hacer que referirme a la página web de Eurostat, donde se dan bastantes detalles sobre cómo se elaboran y lo que significan.
      Tu postura es coherente: según tú, nuestro estado es tan excesivo como lo son todos los demás de nuestro entorno. La intención de este artículo es poner de manifiesto otra postura muy frecuente que, en cambio, no me parece coherente. Consiste en afirmar que nuestro estado es excesivo y al mismo tiempo presentar a Alemania y a otros países europeos como modelo. Consiste en atribuir a la dimensión excepcionalmente excesiva de nuestro estado la mayor severidad de nuestra crisis en relación con esos otros países.
      Por cierto, el término usura no es científico, es verdad, pero tampoco lo son tantas otras cosas que se dicen en este blog y en sus comentarios. Usura, que en sentido estricto significa interés al que se presta, se suele usar para referirse al interés que se percibe como excesivo. Esta percepción, que suele venir de la parte del prestatario, es subjetiva, naturalmente, y no excluye el ten con ten entre la necesidad del prestatario y el riesgo del prestamista.

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  3. Pues .... nos hemos perdido un poco. Tendremos que volver a leerlo para asimilar tanta información, pero nos gusta.

    Peieme

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